Recién en el cuarto match point pudo definir un partido que se le había presentado más simple de lo esperado. Porque, justamente, lo había hecho más sencillo. Fue mérito de Juan Martín del Potro. El tandilense le ganó por un doble 6-3 al croata Iván Ljubicic, en su estreno en el 2010, en el torneo Kooyong Classic de Melbourne, la cita previa que eligió la Torre antes de meterse de lleno en el Abierto de Australia.
Delpo se mostró sobrio y efectivo, como si el 2009 nunca se hubiera terminado. Enfrente tenía a un rival de cuidado, pero que en los papeles era menos que el argentino, a pesar de que en el único enfrentamiento previo entre ellos se había impuesto por 4-6, 6-1 y 6-4 en el ATP de Monaco, el año pasado.
De esta manera, Juan Martín arrancó de manera ideal la semana en la que se ubica en el cuarto puesto del ranking ATP. Ahora, se medirá ante el ganador del choque entre el sueco Robin Soderling y el francés Jo-Wilfried Tsonga.







